Situadas en la meseta de Giza a 18 kilómetros de El Cairo (Egipto), las pirámides de Keops, Kefrén y Micerinos forman parte de la necrópolis de Guiza Patrimonio de la Humanidad desde 1979, es uno de los monumentos más conocidos y antiguos del mundo; su construcción comenzó en el año 2.500 a.c. Es la única de las “Siete Maravillas del Mundo Antiguo” que sigue en pie. Podréis acceder a ellas, siempre y cuando no sufráis de claustrofobia.
La muralla fue designada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 1987. Es una antigua fortificación china construida y reconstruida entre el siglo V a. c. y el siglo XVI (Edad Moderna) para proteger la frontera norte del Imperio chino de los ataques de los nómadas xiongnu de Mongolia y Manchuria. Se calcula que tiene 8.851 kilómetros de largo, desde la frontera con Corea al borde del río Yalu hasta el desierto de Gobi, aunque hoy sólo se conserva un 30% de ella. En promedio, mide de 6 a 7 metros de alto y de 4 a 5 metros de ancho. Una leyenda urbana afirmaba que la Gran Muralla China es la única construcción humana visible desde la Luna, pero se ha demostrado que esta leyenda no es cierta. Es una de los lugares imprescindibles si visitas Pekín.
Construida a mediados del siglo XV en el promontorio rocoso que une las montañas Machu Picchu y Huayna Picchu (Perú), parece ser que sirvió como residencia de descanso de Pachacútec (noveno inca del Tahuantinsuyo, 1438-1470) además de santuario. Su bellísimo entorno hace que sea uno de los destinos preferidos por los turistas de todo el mundo.
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